Esta organización es la que ha alertado a la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) sobre la presencia de las dos vaquitas muertas de las últimas semanas y las totobas que se encontraron en esa región.
El domingo pasado hubo una protesta de pescadores, encabezados por Sushine Antonio Rodríguez, en la que quemaron una embarcación menor en forma simbólica y lanzaron la advertencia. Señalaron que este jueves saldrían en sus pangas al mar y de “ser necesario” quemarían la nave de la organización ambientalista.
En tanto, el proyecto de decreto para ampliar la veda del uso de redes agalleras para la pesca en el norte del Golfo de California está a consulta y se prevé se publicará el 10 de abril, día en que vence el decreto que suspendió por dos años la captura en la región. Aunque el gobierno federal busca con esto proteger a la vaquita marina en su hábitat, el documento no hace mención a las redes tipo chinchorro, que se usan para la pesca de camarón, y en las cuales también queda atrapada la marsopa.
En el proyecto de decreto para la veda, la Secretaría de Agricultura señala que “el gobierno mexicano ha contribuido en la protección y recuperación del número de ejemplares de la vaquita marina, así como en la reducción de los factores de riesgo que han propiciado el peligro de extinción de la especie”.
Sin embargo no precisa que el número de ejemplares de la vaquita, en lugar de elevarse, tuvo una disminución durante los dos últimos años, hasta llegar a alrededor de 30 ejemplares. En el proyecto se detalló que la especie se encuentra en el extremo norte del golfo de California, y es de especial interés, por ser un mamífero marino de los más pequeños a nivel mundial, es una especie endémica cuya biología es poco conocida y esta en peligro de extinción.
Agrega que el Instituto Nacional de Pesca no plantea objeciones técnicas a la decisión del gobierno federal para refrendar el compromiso de protección a la vaquita marina con la suspensión de todas las redes agalleras en la pesca en el norte del golfo de California, con excepción del aprovechamiento de la curvina golfina que se realiza con un método distinto.
Así, plantea la prohibición de redes agalleras para la pesca comercial y deja fuera la pesquería de la curvina golfina, precisa que estas disposiciones se aplicarán a todos los permisionarios y concesionarios que operen embarcaciones menores con redes de enmalle, dedicadas al aprovechamiento pesquero de todas las especies que se encuentran en la región. Ambientalistas advirtieron que hay un vacío en este proyecto, ya que no se menciona nada sobre las redes de chinchorro, utilizadas en la pesca de camarón.
