Aunque oficialmente las campañas no se han iniciado, la guerra entre partidos políticos, que será de pronóstico reservado, si se ha hecho presente ya y la prueba está en la denuncia que el PRI nacional interpuso en contra de la hermana del presidente de México, María Luisa Calderón, a quien se le conoce como «Cocoa».
Ante la negativa del dirigente estatal del PRI, Sergio Alanís Marroquín, de opinar sobre el tema, el que dio la cara por los priístas fue el virtual candidato de ese partido a diputado por el séptimo distrito federal, Édgar Oláiz.
En una breve respuesta dijo: «Le pedimos a la FEPADE que proceda a investigar este asunto por una razón de imparcialidad y una señal que se tiene que mandar sobre cómo se va a conducir frente al proceso 2012, en términos de imparcialidad y legalidad».
Agregó que lo lamentable es que estas acciones que tanto criticó el PAN al PRI y ahora practican ellos, se podrían presentar en la elección federal, en donde se sabe que el presidente Calderón desea conservar el poder para su partido.
«Tiene con esto la posibilidad de despejar el fantasma de una elección de Estado para evitar, incluso, que con programas federales se trate de inducir votos», indicó Oláiz.
Como se sabe, en Michoacán por tratarse de la hermana del Jefe de la Nación, se puso en marcha la maquinaria del PAN para ganar la gubernatura, lo que se confirma con esa presunta grabación de una conversación de ella con un militante y operador de campaña durante el proceso de elección interna para la elección del abanderado a la gubernatura que resultó siendo ella.


