A punto de cumplir 16 años, Osvaldo Ignacio Leyva Díaz, estudiante del
segundo semestre en el CECyTES Hermosillo I La Manga, forma parte del grupo de
ganadores que recibirá en fecha próxima el Premio Municipal del Deporte que
otorga el Gobierno Municipal de Hermosillo.
Con una presencia agradable y carismática, Osvaldo Ignacio recibió este
premio en la categoría juvenil varonil, por haber ganado las pruebas del
heptatlón durante la Olimpiada Nacional Juvenil 2011 que tuvo lugar en la
ciudad de Mérida, Yucatán.
Como parte de la fuerza Sonora de CODESON, Osvaldo obtuvo el año pasado el
más alto puntaje en las siete pruebas a pista abierta que forman parte del
heptatlón, que son velocidad en 80 metros planos y 80 metros con vallas, salto
de altura, salto de longitud, lanzamiento de pelota, lanzamiento de bala y
1,200 metros planos.
Aunque el Premio Municipal del Deporte es por su desempeño en el heptatlón,
la fortaleza de Osvaldo en el atletismo es la carrera de 400 metros con vallas,
aunque también ha tenido un excelente desempeño en los 110 metros con vallas.
En ambas pruebas obtuvo una medalla de oro en la Olimpiada Nacional Juvenil 2012, que en su
etapa regional tuvo lugar en fecha reciente en Culiacán, Sinaloa. Osvaldo
pertenece a la categoría sub 18 juvenil menor y ya se prepara junto con su
entrenador CECyTES, Uriel Alberto Cruz Aguilera, para asistir a la justa nacional que tendrá
como escenario la ciudad de Puebla en el mes de mayo.
A pesar de su juventud, Osvaldo ha tomado decisiones personales fuertes que
son determinantes para desarrollar su carrera en el deporte, como lo ha sido el
dejar de manera temporal el hogar familiar para radicar en la villa de CODESON
y poder dedicar todas las tardes a un entrenamiento intensivo coordinado por el
maestro Cruz Aguilera, en las pistas del estadio “Héroe de Nacozari”, a unos
pasos de la villa.
Si para su participación en Mérida el año pasado sacrificó salidas los
fines de semana sin ir a fiestas ni
convivir con sus amigos, también ahora dedica su tiempo a estudiar por las
mañanas en CECyTES, y por las tardes a entrenar para lograr su objetivo de tener un excelente desempeño
en Puebla y así poner en alto el nombre del Colegio y del Estado de Sonora.
Según comenta Uriel Cruz, los
entrenamientos de lunes a sábado de Osvaldo Ignacio son de las cuatro de la
tarde a las ocho de la noche, y se basan en un plan estructurado que contempla
desde el calentamiento hasta las etapas de fuerza y competencia. Osvaldo brinca
vallas de 91 centímetros de altura y tiene una estatura de 1.75 metros.
Con dos hermanos mayores, Iván de Jesús de 27 años y Dulce de 19, Osvaldo
Ignacio es el menor de los hijos de los señores Ignacio Leyva Gámez y Luz María
Díaz Benítez, vecinos de Hermosillo, quienes comparten con orgullo sus triunfos
y lo apoyan en esta lucha por destacar en el atletismo.
Al preguntarle sobre sus inicios en el deporte, el joven platica que desde
los cinco años empezó a jugar béisbol en la liga infantil Altares, que ya
desapareció, y a la que perteneció hasta la edad de 10 años.
Fue a los 13, cuando estudiaba en la Secundaria Técnica no. 60 ubicada al
sur de la ciudad, cuando inició su entrenamiento en atletismo auspiciado por el
CODESON.
Su “bautizo” en la Olimpiada Nacional Juvenil tuvo lugar en el 2010 en
Guadalajara, donde a pesar de no haber desarrollado aún ni fuerza ni técnica y
ser su año “débil” por competir con jóvenes nacidos en 1995 y 1996, aún así
ocupó un sexto lugar en la competencia nacional. Más horas de entrenamiento y
la implementación de su propia técnica, le valieron ganar el heptatlón en
Mérida 2011.
Sobre su vida como bachiller en CECyTES, Osvaldo Ignacio comentó que sus
compañeros lo apoyan y lo animan a superar sus logros. De las materias que
estudia le gusta la Química y no descarta hacer una carrera profesional en
ciencias como parte de su futuro.
Por lo pronto, su prioridad es el bachillerato y su carrera deportiva y
aunque extraña mucho la convivencia familiar y la comida que prepara su mamá en
casa, señala que el vivir en la villa deportiva fue una decisión personal para
destacar en el deporte.
Osvaldo Ignacio está en espera de noticias del Instituto del Deporte
Municipal, pues está pendiente de definir la fecha de la ceremonia de
premiación a los ganadores del Premio Municipal del Deporte.