La pelea de Manny Pacquiao con el mexicano Juan Manuel Márquez, trajo desilusión y enojo a los mexicanos, sin embargo, en Filipinas la euforia reventó tras el polémico anuncio de los jueces, que vieron vencer al filipino.
Pacquiao terminó con el rostro desencajado y sin ánimos de contestar preguntas, tomó el micrófono y comentó.
“Fue una pelea demasiado dura. Márquez sí logró lastimarme, pero a pesar de todo pude salir adelante y ganar claramente”, dijo el filipino de 32 años, quien esta ocasión dejó en el vestidor la sonrisa que siempre lo acompaña.
Nada se habló de peleas futuras y mucho menos se mencionó el nombre del invicto Floyd Mayweather Jr. con el que esperaba enfrentarse a principios del 2012.


