Lindsay Lohan se vuelve a ver en problemas de robo de joyas y esto sucedió durante una fiesta en las colinas de Hollywood la cual duró hasta altas horas de la mañana.
Una vez que todos se fueron, el dueño de casa se fue a descansar. Horas más tarde cuando despertó, se dio cuenta de que le habían robado sus joyas, por lo que inmediatamente llamó a la policía.
Lohan tuvo que declarar junto con sus dos invitados por ser sospechosos, respondiendo los cuestionamientos de las autoridades pero Lindsay no tuvo nada que ver en el robo.
La ex estrella de Disney el año pasado fue acusada por robar un collar en una joyería de Venice Beach y terminó con 120 días de cárcel y 480 horas de servicio comunitario.
