“La vida es un viaje, no un destino”, escribió hace más de dos siglos
el filósofo y poeta estadunidense Ralph Waldo Emerson. Esa frase se
convirtió en la inspiración de la saga de Madagascar, que hoy
regresa a la cartelera para presentar al público mexicano su tercera
entrega —en 3D— que llevará a sus personajes a una trepidante aventura
por Europa.
La misión es comandada nuevamente por los simpáticos Alex (león),
Marty (cebra), Gloria (hipopótamo) y Melman (jirafa), quienes en su afán
por regresar a su zoológico en Nueva York (luego de perderse en África)
aparecen en Europa, donde tendrán que buscar la manera de atravesar el
Atlántico y volver a casa.
Pero antes, como era de esperarse, tenían que destrozar algunas
ciudades del Viejo Continente, por lo que empiezan en Montecarlo
(Mónaco), al irrumpir en su legendario casino, y salir huyendo hacia
Roma, después de ser acusados de robar uno de los botines más preciados
del lugar. Luego se meten en un circo y las peripecias se suceden una
tras otra.
“Me parece que la saga se ha refrescado con ambientes y
personajes nuevos. Siento que estoy viendo una película completamente
nueva y no una secuela”, exclama Ben Stiller, quien, una vez más, prestó
su voz al divertido Alex.
“Volver a darle tu voz a los personajes produce la misma sensación
que ponerte una chamarra que tenías guardada en el clóset y que te queda
a la perfección”, señala por su parte David Schwimmer, quien por
primera vez podrá presentarle a Melman a su pequeña hija.
“El objetivo de nuestro trabajo es que la voz sea la misma, pero que
las situaciones que muestra la cinta sean nuevas, que se cree más
comedia y más drama, algo que depende de los guionistas”, agrega
Schwimmer, quien siempre será reconocido como Ross, de la serie Friends.
“Yo soy la más feliz con Gloria. En Estados Unidos, cuando los niños
escuchan mi voz, le dicen a sus padres: ¡ella habla como la hipopótamo
de Madagascar! Deberían ver sus caras”, cuenta por su parte Jada Pinket Smith, que tiene una risa tan estruendosa como contagiosa.
“La animación tiene una ventaja enorme para los actores, porque si un
día vas a una sesión de grabación y no estás conforme, le hablas a los
directores y les dices: ¿saben qué?, quiero grabar de nuevo y ellos
dicen que encantados, que cuándo lo programan.
“En acción viva eso es casi imposible. Lo puedes intentar, pero hay
muchos más ejecutivos del estudio involucrados en el llamado”, precisa
la esposa de Will Smith.
Ben Stiller afirma que la razón por la que aceptará el personaje una y
otra vez es por la calidad y lo divertidas que son las historias.
“Es una experiencia muy disfrutable. Es más sencillo porque los
personajes son más familiares y el proceso mejor”, dice Stiller, a quien
no le gustan los zoológicos por exhibir a los personajes encerrados en
jaulas.
“Voy a ellos con mis hijos. Hace unos años vi el documental The Cove (Operación delfín),
que me afectó muchísimo, que me alertó sobre lo que les sucede a los
delfines en esos parques acuáticos. Así que ya no como sopa de delfín”,
señala con humor el comediante.
“También nos encanta esta película porque está Jeffrey (Katzenberg)”,
interrumpe Chris Rock (Marty), quien se declara fan del dueño y
productor de DreamWorks, responsable de películas como Shrek, Monstruos
contra Aliens y Pollitos en fuga.
“Creo que Madagascar se ha convertido en una franquicia, lo
cual no lo veo como un defecto, porque ello asegura cierta calidad y
diversión a los espectadores”, añade Rock.
“Nunca me imaginé convertirme en un jaguar italiano”, comenta Jessica
Chastain, quien debuta en la animación al prestar su voz a Gia en Madagascar 3: Los fugitivos.
A su lado se encuentra Martin Short, aquel comediante que destrozaba
las taquillas en los años 80 y 90 del siglo pasado con películas como Los tres fugitivos o El padre de la novia.
“Yo sí lo predije, Jessica. Cuando vi Historias cruzadas (The Help)
pensé: su siguiente paso será un jaguar animado”, dice bromeando Short
desde un lujoso hotel de Cannes, al que han acudido los actores para
presentar el filme.
Para esta secuela, los realizadores tuvieron que hacer una profunda
investigación de Europa, pues la manada de personajes recorren ciudades
como Mónaco, Roma y Londres, donde van encontrando cientos de problemas a
su paso.
“Fuimos a Mónaco, recorrimos la ciudad y la reconstruimos
digitalmente para le película, lo mismo en Roma y en Londres. Lo que
consigues al trabajar con imágenes y videos es invaluable. Pero también
nos divertimos mucho”, explica Eric Darnell, uno de los tres directores
de Madagascar 3: Los fugitivos.
Conrad Vernon y Tom McGrath, corealizadores del filme, afirman que
algo parecido sucedió con Nueva York, pues en la película aparece The
Freedom Tower, construida en la Zona Cero y que cuando comenzaron la
producción de la cinta no estaba terminada.
“En NY vimos que la construcción estaba en proceso, así es que
preguntamos si estaría lista para cuando la película fuera lanzada y
como dijeron que sí, decidimos incluirla”, precisó Vernon.
Sobre las voces en inglés, fundamentales para darle vida a los
personajes, afirman que los actores se han convertido en auténticos
colaboradores de la franquicia.
“Es un trabajo en equipo; algunos de ellos son incluso directores de
cine y apoyan a revelar su personaje, nos dan ideas para llevar la
historia por alguno u otro lugar. También traen chistes nuevos. Estamos
muy orgullosos de ellos y su contribución”, finaliza McGrath.