China dice estar “totalmente preparada” para una guerra
comercial con Estados Unidos si ésta comienza el viernes.
Se desvanecen las esperanzas de que las dos primeras
economías mundiales alcancen una acuerdo esta semana antes de que Washington
empiece a cobrar aranceles sobre importaciones chinas por valor de 34 mil
millones de dólares.
Pekín ha prometido tomar represalias por el mismo monto.
La cancillería dijo el martes que China estará
“plenamente preparada para tomar un paquete de medidas necesarias” en defensa
de sus intereses nacionales.
En Estados Unidos, una gama de empresas desde destilerías
de whiskey hasta fábricas de automotores podrían verse afectadas por las
represalias chinas.
El presidente Donald Trump acusa a China de adquirir
tecnología estadunidense de manera indebida y limitar el acceso de las firmas
tecnológicas y financieras a su mercado, denuncias rechazadas por Pekín.
BLOQUEA A FIRMA CHINA
El gobierno de Trump actuó este lunes para impedir que
China Mobile Ltd ofrezca servicios en el mercado de telecomunicaciones local,
recomendando el rechazo de su solicitud aduciendo que la estatal presenta
riesgos a la seguridad nacional.
La Comisión Federal de Comunicaciones (FCC, por sus
siglas en inglés) debería rechazar la petición presentada en 2011 por China
Mobile para ofrecer servicios de telecomunicaciones entre Estados Unidos y
otros países, indicó la Administración Nacional de Telecomunicaciones e
Información (NTIA) en un comunicado publicado en su página web.
«Tras tratarlo de manera significativa con China
Mobile, los temores sobre un aumento de los riesgos para los intereses de las
autoridades y la seguridad nacional no pudieron ser resueltos», señaló el
comunicado, que citó a David Redl, secretario asistente de comunicaciones e
información en el Departamento de Comercio, del que forma parte la NTIA.
China Mobile, la mayor operadora de telecomunicaciones
del mundo con 899 millones de suscriptores, no respondió de inmediato a una
petición de comentario.
Sus acciones caían un 2.6 por ciento al comienzo de las
operaciones del martes en el mercado de Hong Kong, tocando un mínimo en más de
cuatro años.
La iniciativa del Gobierno de Trump contra China Mobile
se produce en medio de la escalada de las fricciones comerciales entre
Washington y Pekín.
Asimismo, ZTE Corp, el segundo mayor fabricante chino de
equipos de telecomunicaciones, se vio obligado a parar sus principales
operaciones en abril, después de que Estados Unidos le impuso una prohibición
de negociar con proveedores locales. La sanción podría ser levantada
próximamente, después de que ZTE introdujo cambios en su directorio.
En su recomendación, la NTIA dijo que su evaluación
descansa «en gran parte en el historial de actividades de inteligencia y
espionaje económico de China contra Estados Unidos, así como el tamaño y los
recursos técnicos y financieros de China Mobile».
Agregó que la firma está «sujeta a explotación,
influencia y control por el Gobierno chino» y que su solicitud implica
«riesgos sustanciales e inaceptables a la seguridad nacional y al imperio
de la ley en el ámbito actual».

