ESTADOS UNIDOS.
Un estadounidense de 32 años, de Fort Lauderdale
(Florida), fue atacado por un tiburón cuando buceaba en una isla de Las
Bahamas, según informó este viernes la Policía de ese archipiélago atlántico a
través de un comunicado de prensa, el segundo incidente de este tipo en el
espacio de pocas semanas.
El comunicado detalla que el incidente fue reportado
alrededor de las 17.30 hora local (21:30 GMT) del jueves en Great Guana Cay, un
islote de las Islas Abaco de Las Bahamas, a unos 300 kilómetros de la costa del
sur de Florida.
Según la información aportada por la Policía de Bahamas,
la víctima era un ocupante de una embarcación de 12 metros (41 pies) de eslora
que viajaba con otros dos estadounidenses y que fue atacado por el tiburón
mientras buceaba en aguas de una playa conocida como Nippers.
La Policía indicó que personal de emergencias recogió a
la víctima en el muelle de Marsh Harbour y lo transportó a una clínica para su
tratamiento.
Las autoridades detallaron que el hombre fue atendido
antes de ser trasladado en avión a la isla de Nueva Providencia, donde se ubica
la capital, Nassau, para recibir tratamiento médico adicional.
La identidad de la víctima no ha sido revelada por el
momento por la Policía de Bahamas.
Las autoridades locales tampoco divulgaron información
sobre qué tipo de tiburón atacó al hombre ni el alcance de las lesiones de la
víctima.
El incidente se produjo poco más de una semana después de
que Jordan Lindsey, de 21 años, de la localidad de Torrance (California), fuera
atacada por tiburones mientras buceaba con su familia cerca de Isla de Rose.
Según el comisionado adjunto de la Policía de Bahamas,
Paul Rolle, la mujer estadounidense fue atacada por tres tiburones y sufrió
mordeduras en piernas, glúteos y el brazo derecho, lo que provocó su muerte.
amas trasladó sus condolencias por el hecho y anunció la
apertura de una investigación por el suceso.
Debido al incidente el Ministerio de Agricultura y
Recursos Marinos de Bahamas ha pedido a los bañistas precaución a la hora de
adentrarse en el mar.
Cinco personas murieron por ataques de tiburones en todo
el mundo en 2018, un año en el que los incidentes no provocados fueron
inferiores al promedio y en los que más de la mitad de las víctimas fueron
practicantes deportes acuáticos, según un informe científico publicado en enero
de 2019.
