La Comisión Europea ofreció a los países del continente
asumir los costos de recibir a migrantes llegados por el Mediterráneo, esto
después de que Italia decidiera cerrar sus puertos a embarcaciones de rescate.
Por cada persona aceptada en un país extranjero se
pagaría 6 mil euros, además de que se
financiaría el costo de los expertos que ayuden a regulizar como refugiados a
los inmigrantes indocumentados.
Al hacer públicas sus propuestas, la Comisión explicó que
con esta estrategia se busca generar » una responsabilidad regional
verdaderamente compartida» que responda a los complejos desafíos de la
migración.
España, Francia y Malta podría ser los países más
beneficiados, ya que han recibido a las embarcaciones rechazadas por el
ministro italiano del interior, Matteo Salvini.
El gobierno de Italia rechaza a los solicitantes de asilo
argumentando que recibe una carga injusta de migrantes. Los países de Europa
del Este se niegan a recibirlos, mientras que Alemania soporta una fuerte
presión para otorgar garantías debido a
que es uno de los países destino favoritos.
La Comisión propuso iniciar una fase piloto de un
«centro controlado» para migrantes que podría emplear a cientos de
personas, desde traductores hasta expertos en asilo.
La instalación permitiría una selección rápida de
migrantes que de contar con los requisitos necesarios serían retornados a sus
países de origen. Además de que evitaría la evasión de la normatividad.
Se prevee que la propuesta, que aún es vaga debido que
que no se ha hablado de un sitio específico para la recepción, podría ser revisada por los enviados europeos el día
miércoles.
