El subgobernador del Banco de México, Javier Guzmán aseveró que la inflación en México está bajo control, además de que según sus análisis, no hay evidencia alguna de que existan efectos secundarios, aunque destacó, la Junta de Gobierno debe ser cautelosa ante el riesgo de una serie de aumentos.
Información del banco central mexicano destaca que a inicios de marzo, la inflación se disparó a su mayor nivel en un periodo de casi 8 años, lo cual obligó al gobernador de la institución, Agustín Carstens, proponer tasas de interés más altas para enfrentar una «burbuja» de inflación que se espera disminuya más tarde en el año.
Guzmán destacó que la principal preocupación de Banxico es que la conjugación de diferentes escenarios como el debilitamiento de la divisa nacional, una alza en los costos de los hidrocarburos que acarrean el incremento de los precios de productos agrícolas y un incremento del salario mínimo, podría ocasionar el descontrol de la inflación.
Sobre el punto, el funcionario declaró: “en general no vemos evidencia de efectos de segundo orden así que (…) se podría decir que la situación está bajo control, pero por otro lado hay una serie de riesgos al alza por lo que tenemos que tener mucho cuidado”.
Y agregó que se mantendrán a la espera de que los efectos sean temporales y con ello poder alcanzar durante el próximo año, el objetivo de la tasa de inflación del 3 por ciento.
Con información de El Financiero
