“Esto es absolutamente falso. Exigimos a quienes acusan que presenten las pruebas respectivas. Nos reservamos el derecho de recurrir a instancias legales. En una democracia no se puede fingir que se impone la ley, violando la ley. Basta ya de usar los instrumentos de la justicia con fines electorales”, advirtió.
“Por ello, el PRI rechaza cualquier intento de persecución política y el uso partidista de la procuración de justicia en contra de adversarios políticos. En una democracia estas conductas son inadmisibles”, agregó.
La difamación y la filtración mal intencionada de posibles investigaciones son ilegales y corresponden a prácticas de un gobierno autoritario.