Ciudad del Vaticano.- El papa Francisco inició su pontificado ofreciendo una misa en la Plaza de San Pedro, a la que muchos líderes y políticos del mundo fueron invitados, entre ellos la actriz Angélica Rivera, esposa del presidente de México, Enrique Peña Nieto.
La mexicana, recordada por telenovelas como “Destilando amor” y “La dueña”, ya había visitado el Vaticano en 2009, cuando Peña Nieto, entonces Gobernador del Estado de México, decidió darle el anillo de compromiso en la Basílica de San Pedro.
La actriz apareció luciendo un elegante vestido negro, como marca el protocolo, un saco que destacaba su figura y zapatos de tacón. Cubrió su cabellera castaña larga con una mantilla.
¿Por qué Angélica Rivera fue de negro a la entronización del Papa Francisco?
Ni está de luto ni es el color de la temporada ni quiere aparentar que está más flaca. La esposa del Presidente de México, Enrique Peña Nieto, iba totalmente de negro, pero no por decisión propia. Así lo establece el protocolo de la vestimenta para las monarcas, jefas de Estado y esposas de presidentes.
Bajo ninguna circunstancia una mujer debe presentarse vestida de blanco en las audiencias de San Pedro. Esa es una concesión exclusiva de las reinas católicas y de las consortes de los monarcas católicos a manera de agradecimiento a las casas reales.
Las únicas comadres que tienen el “Privilegio de Blanco” o Privilege du blanc son: la reina Sofía de España, la reina Fabiola de Bélgica y la gran duquesa María Teresa de Luxemburgo.
Las reglas son muy precisas: vestidos formales en color negro, sin escotes, de manga larga, los cuales deberán llevar la falda por debajo de las rodillas y cubrir la cabeza con una mantilla negra. Se considera de muy mal gusto que el tacón de los zapatos sea demasiado alto, que usen joyas vistosas y que acudan con exceso de maquillaje.
La Primera Dama de México cumplió al pie de la letra el protocolo.
FOTOS: Explicación de la vestimenta de Angélica Rivera en el Vaticano
