Tres policías federales fueron asesinados a balazos por dos elementos
de la misma corporación sospechosos de narcotráfico dentro de la
Terminal 2 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM).
Así lo confirmó la Secretaría de Seguridad Pública federal (SSP), la
cual precisó que los dos elementos responsables del crimen iban a ser
detenidos por las víctimas, tras ser investigados por participar en una
red de tráfico de droga que opera a través del AICM y que ha sido
seguida desde hace 18 meses.
El enfrentamiento ocurrió a las 8:50 horas en el pasillo paralelo a
la zona de mesas del área de alimentos, en el primer nivel de la
Terminal 2, frente a unas 40 personas, algunas de las cuales
atestiguaron extrañadas cómo policías se disparaban entre ellos.
“Estábamos tomando un refrigerio cuando escuchamos tres detonaciones,
volteamos y vimos a tres policías, uno en el suelo, y dos le
disparaban, directamente; todos estaban uniformados con un traje azul
marino, los chicos que dispararon se fueron corriendo hacia el
estacionamiento”, relató una mujer, quien acompañaba a una amiga que
partía hacia Los Ángeles, Estados Unidos.
La SSP explicó que los tres policías federales que fallecieron eran
agentes de inteligencia que llevaban semanas indagando la red y vestían
el uniforme de los elementos de la División de Seguridad Regional,
responsable de la vigilancia en el AICM, para no ser detectados como
investigadores.
De acuerdo con funcionarios consultados, los policías de
investigación se reunieron en un restaurante antes de emprender la
detención de los sospechosos.
En su comunicado oficial, la dependencia aseveró que los dos policías
indagados estaban adscritos a la seguridad del AICM y que al detectar
que serían detenidos abrieron fuego contra sus compañeros de
corporación.
Dos de los agentes investigadores fallecieron en el lugar, mientras
que la tercera víctima fue trasladada herida a un hospital privado,
donde murió. Más de 15 casquillos quedaron en el pasillo, el cual
conecta el ambulatorio de Salidas Internacionales con el estacionamiento
de la Terminal 2.
A pesar de que existen 10 cámaras de seguridad en el área del ataque,
los dos agresores descendieron a la planta baja por las escaleras de
emergencia y corrieron por un pasillo de cerca de un kilómetro que
conduce al Eje 1 Norte, cruzando los estacionamientos de usuarios y
taxis, sin que fueran detenidos.
Existen indicios de que al menos uno fue herido en el incidente, dado
que en todo su camino de escape hasta la vía pública fueron halladas
gotas de sangre.
Los dos policías están identificados y la corporación realiza acciones para detenerlos, aseguró la SSP.
Abundó que la investigación del tráfico de droga, en el que también
estarían implicados servidores públicos de otras dependencias, partió de
distintas acciones realizadas en el AICM en las que fueron asegurados
294 kilos de enervantes desde 2011.
“Líneas de investigación generadas a través de estos meses y derivado
de los recientes aseguramientos de cocaína permitieron ubicar una red
de funcionarios de diversas dependencias locales y federales, adscritas
al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México y presuntamente
involucrados con el tráfico de drogas en esta Terminal áerea”, sostuvo
la SSP.
El incidente no afectó la operación del AICM, instalación estratégica
que es resguardada por 300 policías federales; 120 elementos de la
Policía Auxiliar del DF, y 2 mil 100 guardias privados de tres empresas,
auxiliados por 830 cámaras en las dos terminales.
Según la PGR, la Subprocuraduría de Investigación Especializada en
Delincuencia Organizada (SIEDO) está a cargo de la investigación para
lograr el paradero de los policías agresores.
Cuatro horas después del crimen, elementos de la Policía Federal
revisaron y aseguraron tres sucursales de la casa de cambio Prodira en
la Terminal 2 del AICM, como parte 40 cateos ejecutados contra la
empresa en seis entidades del país.
A las 12:50 horas, unos 30 agentes ingresaron a los locales de la
casa de cambio abiertos en los dos niveles de la terminal, mientras a la
distancia peritos de la PGR recababan evidencias de la muerte de los
agentes investigadores.
Paralelamente, personal de la Unidad Antilavado de la SIEDO realizaba
cateos en sucursales de Prodira en Zacatecas, Jalisco, Durango,
Aguascalientes y San Luis Potosí, apoyados por policías federales y
militares.
Entre las acciones fue cateada la casa de Filemón García Ayala,
propietario de la empresa, en la capital de Zacatecas, informó la
Procuraduría de Justicia estatal.
García Ayala había sido detenido hace dos meses en el aeropuerto de
Calera de aquel estado cuando se trasladaba a la Ciudad de México
portando 2 millones de dólares.