El menú para los miembros de la Academia y realeza sueca
que acudieron el pasado lunes 10 de diciembre al tradicional banquete de los
Premios Nobel incluía verduras pero una tarta de apio no terminó precisamente
en el plato, sino en el abrigo del profesor de biología Dan Larhammar.
En un descuido, el mesero se rascó la cabeza y la bandeja
resbaló, dejando caer el bocadillo sobre el investigador que curiosamente nunca
notó el hecho. Sin embargo, cuando creía que estaba a salvo, el responsable de
38 años se dio cuenta que había sido capturado por las cámaras y su reacción
fue muy divertida.
«Simplemente voló», relató Vadimas al portal
Expressen. Y agregó que intentó recuperar la porción pero Larhammar se apoyó
sobre la silla, lo que dificultó la arriesgada tarea. Por su parte la
presidente del Partido del Centro, tomó con humor la situación y el
Ayuntamiento se ofreció a pagar la limpieza del traje.
