Héctor Luna
Marco está en una división de alto nivel competitivo, pues el peso medio engalana nombres como Sergio Martínez, Felix Sturm, incluso hasta el controvertido Julio César Chávez Jr. que con el cual, Marco ‘Veneno’ Rubio, tuvo una dolorosa derrota en su última pelea, y es de la que pretende levantarse.
Los números del ‘Veneno’ son impactantes, ya que tiene 53 victorias, 45 de ellas por nocaut, y seis derrotas, esto nos hace imaginar el poder que el coahuilense tiene en sus puños.
Rubio pudo haber quebrantado la ilusión de muchos en su combate ante Chávez Jr., pues era de los pocos indicados en poder vencer al ‘Hijo de la Leyenda’, sobre todo por cómo se miró ante Matt Vanda dos meses antes, sin embargo, el boxeo no le pudo retribuir con el campeonato mundial de los mediano del CMB ese cuatro de Febrero del año en curso.
Tras esa pelea perdida, por decisión unánime, pocos esperan que Marco tenga algo para otorgar al boxeo, porque sí, 32 años ya son indicativo de algo tardío, pero la realidad es que es una edad plena en el ámbito boxístico, sobre todo, porque es la edad vital de la adquisición de la experiencia.
Hoy busca el campeonato de la Federación Internacional de Boxeo (FIB), su rival es Jorge “Demonio” Cota, un púgil invicto, pero con apenas dieciséis combates.
Tal vez Rubio quiso meterse presión al decir que de no ganar se retiraría del box, pues entendemos, sobre todo él, que su regreso debe ser, más allá de ganar, de impactar y volver a poner las esperanzas en él, incluso hasta para reinar en la división.
Las cualidades las tiene, tal vez no son las más estéticas, tampoco es un estilista, pero la convicción, el poder, la inteligencia, el boxeo propositivo y que gusta, son armas suficientes para pasar el obstáculo Cota y enfocarse en una revancha, porque se cree que la segunda oportunidad puede inclinarse hacia el lado del ‘Veneno’, y sin dejar dudas.
Este día estaremos presenciando el regreso de un mexicano que tiene todo para sobresalir en su categoría, y es que cada vez que Marco Rubio pisa un ring, el veneno está latente y el espectáculo está asegurado.
