CIUDAD DE MÉXICO
Cuando los gatos enferman suelen dejan de comer y si no
son atenidos con oportunidad, pueden presentar grados de anorexia, afirmó
Tamara Iturbe, académica de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia
(FMVZ) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Son diversas causas por las que un felino no se alimenta:
desde problemas neurológicos o de comportamiento, hasta afecciones renales o
alguna enfermedad que les produzca dolor. También son neofóbicos, es decir,
todo lo nuevo les generara estrés y dejan de comer.
La especialista resaltó que los gatos no pasan
directamente a la anorexia; inicialmente comen poco y cada vez lo hacen menos,
hasta que ya no ingieren nada.
“Los dueños deben estar atentos porque si no se atiende
oportunamente este problema, el animal de compañía puede morir”, advirtió la
académica en un comunicado.
Sugirió que si lleva dos o tres días sin alimentarse, es
necesario acudir al veterinario, y destacó que es difícil que los responsables
de los felinos noten una pérdida de peso, hasta que es muy evidente. El
problema, dijo, es que un kilogramo representa cerca del 25 por ciento de su
peso total.
En ese sentido, recomendó llevarlos a revisiones
periódicas para tener un control e identificar cualquier cambio antes de que
sea preocupante.
Aunados a los cambios en su entorno, hay otros motivos
por los que dejan de comer, como la enfermedad renal crónica (entre otras
afecciones primarias), que les provoca náuseas por los niveles altos de urea.
Otras causas pueden ser la anemia o el cambio repentino
de alimento, así como infecciones respiratorias, porque producen secreción
nasal severa y densa que se apelmaza alrededor de sus narinas; entonces, no se
alimentan porque no huelen la comida.
En ocasiones, aunque el gato tenga hambre no consume nada
por dolor en la boca debido a tumores, gingivitis o un diente en mal estado.
Esto se conoce como pseudoanorexia.
“Debemos preocuparnos si el gato deja de comer, pues por
ser un carnívoro estricto no tiene reservas y necesita obtener del alimento
ácidos grasos esenciales, aminoácidos y vitaminas. De no ser así, tendrá
problemas como lipidosis hepática, enfermedad más común asociada a la anorexia.


