Todo indica que los años de excesos que vivió Lindsay Lohan han dejado
más estragos en su belleza de los que eran evidentes: arrugas,
resequedad, dientes manchados, etc., pues ahora se difundieron
fotografías que ponen en evidencia su pérdida de cabello.
Lindsay lleva mucho tiempo recurriendo a extenciones, tintes, alaciados,
peinados y decoloraciones en su afán por cambiar su imagen
constantemente, pero parece que todo ese decuido ya le está cobrando
factura..
Mientras la actriz de 26 años salía de un restaurante el pasado jueves,
los fotógrafos que la esperaban captaron imágenes en las que se puede
ver que en medio de la pelirroja cabellera de la actriz hay algunas
zonas de calvicie.
Recordemos que además del abuso de postizos y químicos, Lohan también
tiene un historial de adicciones y trastornos alimenticios, lo que muy
posiblemente ha debilitado la capacidad de su cuero cabelludo para
regenerar su melena y mantenerla fuerte.
¿Será que pronto la veremos de nuevo usando pelucas?
