El empresario textilero Miguel Moisés Sacal evitó ingresar a prisión con el pago de una garantía de dos mil pesos, como parte de un amparo promovido contra la orden de aprehensión por las lesiones que provocó al valet parking de una torre en Bosques de las Lomas.
Registros oficiales indican que el 9 de diciembre, el Juzgado Sexto de Distrito de Amparo en materia penal ( el juez es Juan Mateo Brieba de Castro) otorgó a Sacal una suspensión provisional contra la orden de aprehensión, librada tres días antes por el juez 47 de Paz Penal del Distrito Federal.El 15 de diciembre, la suspensión provisional se convirtió en definitiva, sujeta al pago de una garantía de 2 mil pesos, monto que es habitual en amparos por delitos no patrimoniales.
Sacal pagó la garantía el 20 de diciembre, y la suspensión impidió a la Procuraduría capitalina (PGJDF) ejecutar la orden de aprehensión dos días después.
Aún si hubiera sido aprehendido, Sacal hubiera recuperado su libertad en pocas horas, pues el delito de lesiones en segundo grado que le imputó la PGJDF no es grave.
La diferencia es que para obtener su libertad bajo fianza, Sacal hubiera tenido que garantizar los costos de reparación del daño que causó a Hugo Enrique Vega Flores, el valet parking al que agredió en julio de 2011 por no ayudarlo a cambiar una llanta de su automóvil.
En el amparo, el juez no está obligado a exigir al quejoso que garantice la reparación del posible daño, por lo que las garantías que se exigen para la vigencia de las suspensiones usualmente no rebasan los 10 mil pesos.
Protegido por la suspensión, Sacal se presentó a rendir declaración preparatoria ante el Juzgado 47 de Paz Penal, y enfrenta en libertad el proceso respectivo, donde la pena máxima que se le puede imponer es de dos años de cárcel, por lo que es previsible que se le concederá el beneficio de la sustitución de la prisión por una multa o servicio a la comunidad.
A finales de diciembre, Sacal no cumplió con la obligación de presentarse a firmar en el juzgado de amparo, pero el pasado 28 de diciembre, el juez dejó pasar el incidente y le ordenó presentarse el 16 de enero.
Los abogados de Sacal mantenían monitoreada la averiguación previa en la PGJDF, pues el 30 de noviembre promovieron su primer amparo, que fue desechado el 16 de diciembre por el juzgado quinto en esa materia, luego que las autoridades negaron que existiera alguna orden de aprehensión.
