Por
Rodrigo Sotelo / Twitter: @masmedio
La Secretaría de Educación y Cultura no lo ha declarado u
oficializado, pero el ex funcionario de la administración padrecista que acaparó, por lo menos y con terceras personas, 25
concesiones de tienditas escolares,
es Cristián Félix Valdez.
Este escandaloso tema aparentemente se ha archivado o
postergado en la instancia investigadora, y no se entiende por qué.
En su momento, César Romo Noriega, coordinador general de
la dirección de Salud y Seguridad Escolar, fue quien dio a conocer la denuncia
pública, que se dijo sigue su proceso en Contraloría estatal y en la Fiscalía
Anticorrupción.
El funcionario priista, acusó que las irregularidades
detectadas consistían en que las tienditas
que se asignaron en el anterior gobierno panista, no pasaron por el Comité de
evaluación que debió votarlas previo análisis del solicitante o beneficiario.
“Los tenemos bien
detectados. Por lo mismo, no podemos decir los nombres para no entorpecer las
investigaciones”, reveló Romo Noriega.
Nosotros sí podemos y tenemos la obligación moral de
exhibirlo: el insaciable acumulador de tienditas
fue Cristián Félix, ex particular del ex secretario Jorge Luis Ibarra Mendívil.
Este joven que se decía apartidista, controlaba –entre
muchas otras cosas- la asignación de tienditas
en todo el estado, en contubernio con las secciones sindicales del magisterio
(28 y 54) y por medio de Baltazar Valenzuela Murillo, ex coordinador de Salud y
Seguridad Escolar.
El negocio era sencillo y muy redituable. Considere este
dato: cada tiendita escolar, deja en
promedio una utilidad de entre 20 y 30 mil pesos mensuales.
Es decir, Cristián se embolsaba –sin meter las manos-,
algo así como 700 mil pesos mensuales libres
de polvo y paja.
El caso no es menor y amerita un puntual seguimiento por
parte de César Romo, así como por sus subalternos facultados y obligados, más
ahora, a que esta ilegal y deshonesta práctica no se repita, se castigue y
restituya el daño ocasionado.
Uno de ellos, el joven Luis Miguel Vargas Delgado, director
de Vinculación en Salud y Seguridad Escolar de la SEC, y quien tiene dentro de
sus responsabilidades la supervisión de la operación de estas tienditas escolares.
Y es que, lo que ocurría en el gobierno de Guillermo
Padrés era grotesco. Incluso, había tienditas
escolares de nivel secundaria, ubicadas en municipios como Huatabampo,
donde vendían ¡cigarros!
El área que encabeza César Romo tiene el reto de inhibir
esta añeja costumbre de ver las tienditas
como patrimonio de los sindicatos y la autoridad en turno.
Tampoco se ha dicho, pero debe saberse que Javier Duarte
Flores, dirigente de la Sección 28, goza o disfrutó de este irregular beneficio
y se incluyó en la pasada administración dentro de los concesionarios de tienditas.
Romo tiene la obligación de transparentar no solo lo que
ocurría antes, sino de ofrecer un método y sistema menos vulnerable, donde
cualquiera pueda cotejar cada nombre, sus ligas políticas, partidistas y
gubernamentales; así como amistades,
compadrazgos o parentescos.
Decirnos, por ejemplo, ¿quién integra el Comité evaluador
que autoriza o rechaza a los aspirantes a explotar el negocio de las tienditas en escuelas públicas? ¿Cuáles
son los criterios?
Lo vamos a buscar para que nos detalle y pedirle la lista
corregida y actualizada.
Gracias y hasta la próxima con el favor de Dios.
Rodrigo
Sotelo Mendívil
Director
General Masmedio
Correo: rodrigosotelo69@hotmail.com
Twitter:
@masmedio