Estados Unidos.- La obesidad ha alcanzado a un gato de 13 años, su nombre es Holly, y pesa poco más de 8 kilos. Para bajar de peso el gordo gato nada en la piscina en el Olde Towne Pet Resort en Dulles, Virginia.
El gato ha estado nadando regularmente desde mayo del año pasado llevando un chaleco salvavidas. La piscina es generalmente utilizada por los perros para el ejercicio, la movilidad y la terapia.
El propietario de Holly estaba tratando de encontrar una manera de conseguir que su gato obeso realizara alguna actividad física. Dijo: “Más que nada fue un experimento“. Vió que su gato no se molestaba demasiado cuando ella lo bañaba, así que pensó: “Me pregunté que pasaría si la ponía en la piscina”, dijo según explica Today.com
El gato va a la piscina casi casa dos semanas. El resto del tiempo, ella disfruta viendo la tele y moviéndose lo menos posible.
Su dueña espera que el gato baje unos 3 kilos para llegar a un peso más saludable.
