La estadounidense Nadia Isle fue duramente criticada y señalada durante
gran parte de su infancia por el tamaño de sus orejas, ataques que la
llevaron a ser una niña tímida, insegura y retraída, por lo que
aprovechó la primera oportunidad que tuvo para operarse y recuperar de
esa forma la confianza y las ganas de vivir.
«Luzco hermosa», declaró la joven tras haber sido sometida a una
operación de 4 horas, la cual tuvo un costo de 40 mil dólares, pero fue
costeada en su totalidad por la Fundación Liitle Baby Face, encabezada
por Thomas Romo III, la cual está enfocada en reconstruir la vida de
niños que hayan nacido con alguna deformidad.
«El Doctor Romo sintió la necesidad de utilizar su experiencia para
ayudar a transformar la vida de niños con deformaciones en la cara»,
declaró Don Moriarty, quien trabaja en la citada fundación.
