El expresidente estadunidense Donald Trump ha pospuesto su decisión definitiva sobre si ordenará un ataque contra Irán, aunque ya aprobó planes preliminares para bombardear Fordo, la instalación nuclear más segura del país persa. Así lo confirmaron fuentes de inteligencia y defensa a la cadena CBS News.
Según el reporte, Trump fue informado sobre los riesgos y beneficios de un ataque militar, y considera que deshabilitar Fordo es esencial para evitar que Irán produzca armas nucleares en un corto plazo. «Él cree que no hay muchas opciones. Terminar el trabajo significa destruir Fordo», señaló una fuente.
Evaluación en curso: ¿ataque o negociación?
En una declaración leída por la secretaria de prensa Karoline Leavitt en la Casa Blanca, Trump anunció que tomará una decisión «en las próximas dos semanas», debido a la posibilidad de negociaciones diplomáticas con Irán, afirmando que Teherán solo necesitaría «dos semanas» para producir bomba nuclear.
La inteligencia estadunidense mantiene que el líder supremo iraní aún no ha dado la orden de fabricar una bomba nuclear. No obstante, informes recientes indican que el enriquecimiento de uranio ha aumentado y que el país podría alcanzar capacidad armamentística en cualquier momento.
La CIA no se ha pronunciado oficialmente, pero su director John Ratcliffe habría declarado que negar la cercanía de Irán a una bomba sería «como decir que un equipo de fútbol (americano) en la línea de una yarda no quiere anotar». Sin embargo, el senador demócrata Mark Warner enfatizó que aún no hay pruebas de que Irán haya avanzado en un dispositivo de lanzamiento nuclear.
Mientras Trump evalúa su siguiente paso, líderes europeos intensifican los esfuerzos diplomáticos. Este viernes, los ministros de Exteriores de Alemania, Francia, Reino Unido y el alto representante de la UE se reunirán con el canciller iraní Abbas Araghchi en Ginebra. Londres, que mantiene embajada en Teherán, actúa como intermediario clave.
Paralelamente, fuentes del Pentágono informan que Irán ha preparado misiles y equipos para atacar bases estadounidenses en Medio Oriente si Estados Unidos se une a los bombardeos israelíes. Trump reconoció que estudia usar bombas antibúnker contra Fordo, pero no ha ordenado el ataque.