Gana Maximiliano Mendoza "Calaveras Literarias y Altares 2012" de ISSSTESON

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Por Cristóbal Copetillo
El talento heredado de su padre  para escribir versos ha hecho que Maximiliano Mendoza Estrella, trabajador del departamento de archivo del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado de Sonora (ISSSTESON) haya ganado por décima quinta vez el concurso de calaveras de la dependencia.
Maximiliano se ha ganado a pulso de sus calaveras el respeto de director y subdirectores del ISSSTESON y durante 15 años siempre ha estado en la lista de los primeros lugares.
A continuación se muestra la calavera con la Maximiliano ganó el tradicional concurso de la dependencia:
Allá por hidalgo 15
la muerte llegó a ISSSTESON,
tal y cómo lo hacen todos
se dirigió a información.
Poncho muy acomedido,
pudo contener un grito,
rápido y presto el fué
y le entregó un numerito.
La muerte desconcertada,
y sin poder comprender,
puede usted tomar asiento,
con ése número la van a atender.
Entra sin hacerle caso,
haciendo un gesto de muina,
y se vá a la jefatura,
de pensiones con Corina.
Corina muy sorprendida,
le dice: «usted perdone,
se equivocó usted de puerta,
o viene a que la pensione?»
Sigue su paso la muerte,
impresiona su presencia,
enseguidita se mete,
con Marcia Durazo en vigencia.
Celinaaaa grita Marcia preocupada,
atiéndeme a ésta señora,
si viene por credencial,
por favor, désela ahora.
la muerte sin inmutarse,
ni preocuparse siquiera,
saliendose de Vigencia,
se vá con el contador Herrera.
El Contador preocupado,
siempre con mucho pendiente,
le dice rápido a Luis:
«Consígueme su expediente».
Señora aún no me lleve,
que tengo mucho trabajo,
y para que usted me deje,
le consigo un corto plazo.
y sube las escaleras,
escalón por escalón,
lo que le interesa a ella,
se encuentra en la Dirección.
David le dice a la muerte
impactado por su presencia:
«Dígale a Lupita Franco,
que le consiga una audiencia».
«Yo no necesito audiencia»,
le dice con voz quedita,
«vengo por todos ustedes,
y también por Teresita».
Dice Teresa, valiente:
«a mi no me vá a llevar,
déjeme usted otro rato,
pa´ inaugurar otro Hospital».
y no encontrando salida,
la muerte quiso escapar,
la escalera contra incendios,
a ella le tocó estrenar.