La Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) manifestó su preocupación y rechazo por las agresiones contra periodistas en Chihuahua y Sinaloa en los últimos días, entidades donde se tienen registros de agresiones anteriores.
El organismo capitalino señaló que, de conformidad con el testimonio de integrantes de los medios de comunicación afectados, agentes estatales los hostigaron e incautaron y destruyeron equipo fotográfico, para finalmente detenerlos de manera arbitraria.
En un comunicado detalló que en el primer caso se mencionó que el 30 de enero pasado elementos de la Policía Ministerial de Sinaloa agredieron a Ararak Salomón, reportero del diario Noroeste.
En este caso, un elemento policial forcejeó con el periodista para arrebatarle su equipo fotográfico mientras llevaba a cabo su labor informativa, lo que hizo que otros ministeriales se sumaran y lo golpearan por la espalda para someterlo y quitarle la cámara.
El reportero Ararak Salomón recuperó su equipo, pero las imágenes fueron borradas, gráficas donde el periodista registró el momento de la detención de varios mandos de la Dirección de Seguridad Pública Municipal de Guasave, para ser investigados por no haber atendido el llamado de auxilio que les hicieron militares.
El llamado de ayuda se registró mientras los elementos castrenses se encontraban bajo fuego en un operativo contra la delincuencia organizada, enfrentamiento que tuvo como resultado la muerte de tres elementos del Ejército Mexicano.
Por otra parte el reportero Joel González, de El Diario de Juárez, fue detenido la noche del viernes 3 de febrero por agentes de la Policía Municipal de Ciudad Juárez mientras reporteaba la detención de una ciudadana en la vía pública.
El comunicador fue arrastrado por dos policías hasta la caja de una patrulla cuando pretendía retirarse de la escena en la que ocurrieron los hechos.
De acuerdo con el rotativo, la corporación policial informó que Joel González fue detenido por obstruir la labor de los agentes; sin embargo, un video que también fue difundido por ese medio registró que el reportero llegó al lugar cuando la ciudadana ya había sido arrestada.
En este caso, el periodista estuvo detenido tres horas y liberado hasta pagar una multa de 320 pesos.
