Será 2 de octubre fecha de duelo nacional

0
3

La Cámara de Diputados aprobó por unanimidad que el 2 de octubre sea incluido en las fechas de duelo nacional y que la bandera nacional sea izada a media asta en escuelas, edificios públicos, embajadas y consulados de México.

Los diputados aprobaron la minuta del Senado que adiciona la fecha de 2 de octubre, «aniversario de los caídos en la lucha por la democracia de la plaza de las Tres Culturas en Tlatelolco en 1968».

Con 333 votos del PRI, PAN, PRD, PVEM, PT, Panal y Convergencia, la Cámara Baja culminó la adición a la Ley sobre el Escudo, la Bandera y el Himno Nacionales, que propuso desde abril de 2007, el perredista Pablo Gómez Álvarez, y que en la ronda de posicionamientos de esta tarde abundaron las críticas sin defensa al entonces presidente Gustavo Díaz Ordaz y a su secretario de Gobernación, Luis Echeverría.

Javier Corral, presidente de la Comisión de Gobernación de la Cámara de Diputados, presentó el dictamen al pleno y planteó que las fuerzas armadas «no son herederas de la bestialidad» que ocurrió en 1968, «ni son custodios del silencio y el olvido».

El homenaje a los caídos en 1968 es una deuda histórica, subrayó Corral Jurado al pedir el voto al dictamen que llegó a san Lázaro el 8 de diciembre de 2008, se había quedado en la congeladora y cuando la aprobó por unanimidad la Comisión de Gobernación, en septiembre, se quedó detenido hasta ayer que llegó al pleno.

El homenaje, de acuerdo con el dictamen, es para «un número significativo de ciudadanos, en su mayoría estudiantes, que participaban en una manifestación política resultaron muertos, heridos o detenidos por efectivos militares mediante el uso indiscriminado de la fuerza».

El pleno aprobó el decreto en el que se expone que «el movimiento estudiantil sintetiza la lucha de lo nuevo de una nueva clase política contra la vieja sociedad».

Manifiesta que «sin el movimiento estudiantil de 1968, no sería explicable la reforma política de 1977 con la que el Partido Comunista Mexicano obtuvo su registro electoral, y gracias a esto se fortaleció el sistema democrático».

Después de 43 años de aquella masacre, el pleno de los diputados aprobó que «es necesario otorgar al movimiento estudiantil de 68, un reconocimiento oficial por parte del Estado mexicano de su responsabilidad en una acción de ejercicio desmesurado de su fuerza represiva».

Oradores de la izquierda (PRD y PT) y del PAN acusaron que el 68 es una página negra en la historia nacional, y por conducto de Beatriz Paredes, el PRI dijo que estuvo representado en las calles y plazas y escenarios de decisión. Uno de los diputados priistas, Carlos Flores Rico describió la circunstancia en la que sobrevivió la noche de Tlatelolco, con el rostro bañado en sangre.

El 2 de octubre, afirmó Paredes, abrió la ruta de la democracia que nos permite estar aquí. Y rindió homenaje A Fernando Solana, quien participo al lado del rector de la UNAM, Javier Barros Sierra.

Pidió no juzgar a las fuerzas armadas de hoy, en tanto que la izquierda en tribuna acusó al Ejército de la masacre, de las detenciones de miles de jóvenes y represor de una sociedad que llevó a las armas de la guerrilla a miles más.

Guadalupe Acosta Naranjo (PRD), dijo que este reconocimiento al 68 es lo menos que pueden hacer el Congreso y la Cámara de Diputados, cuando de pié en 1969, aquella legislatura aclamó por la masacre a Gustavo Díaz Ordaz.

Los oradores de la izquierda acusaron como responsables de la violencia contra la sociedad en ese año a Gustavo Díaz Ordaz y a su secretario de Gobernación, Luis Echeverría Álvarez, y sin embargo no hubo oradores que los defendieran.