Enrique Peña Nieto da prioridad a Ciudad Juárez

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El candidato de la coalición Compromiso por México (PRI-PVEM),  Enrique Peña Nieto, visitó Ciudad Juárez, Chihua-hua, uno de los municipios más afectados por la violencia generada por el crimen organizado.
En su tercer día de actividades proselitistas, el aspirante a la silla presidencial dio a conocer ante los juarenses dos compromisos que firmó ante notario público. Uno de ellos será el de impulsar la competitividad en la ciudad fronteriza para atraer mayores inversiones y por ende generar más empleos.
“Convocar para que los sectores productivos de Ciudad Juárez definamos desde el gobierno mecanismos fiscales que privilegien la condición de Ciudad Juárez y la vuelvan una ciudad competitiva, es decir, un trato de excepción fiscal por ser una ciudad de las más importantes del mundo por su conexión con Estados Unidos”, señaló.
En este mismo escenario, dijo que, para combatir eficientemente la inseguridad, asumió el compromiso para crear academias regionales para lograr una mayor profesionalización de los cuerpos policiacos.
“Es cierto que tenemos que preparar bien a nuestras policías para combatir al crimen organizado que actúa con mayor sofisticación, con más equipo y mejor armamento, ya que la actividad delincuencial se ha vuelto más violenta”, expuso.
En este contexto, anunció la lucha de un frente nacional contra la violencia, con la participación de todos los ámbitos de gobierno, sin importar a qué partido represente; lo importante es la conjunción de esfuerzos, “esto es una tarea del Estado, en donde se debe de involucrar a todos los órdenes de gobierno”.
Admitió que el asunto de la seguridad no es un tema menor porque lastima la convivencia social de los mexicanos y representa la mayor preocupación de las madres, las esposas y de la sociedad en general. Ante miles de juarenses reunidos en el Parque del Monumento a Juárez, Peña Nieto dijo que la inseguridad es, sin duda, el signo que marca los tiempos modernos de México.
Indicó que los crímenes y la impunidad con la que actúan los delincuentes son el diagnóstico lacerante y crítico en que viven varias entidades del país, y sobre todo Ciudad Juárez.
Dijo que los mexicanos no nos resignaremos a vivir así, “queremos un cambio, queremos un rumbo diferente, queremos que regrese la paz y la concordia, queremos que se hagan bien las cosas, queremos que haya orden, no ineficiencia”.
En este sentido, el político mexiquense señaló que la sociedad demanda un México donde logremos  cambiar las cosas que hoy tenemos y que no aceptamos y que menos nos resignamos a mantener sólo porque sea la constante de nuestra vida cotidiana.
Y es que las estadísticas indican que desde hace varios años la guerra entre narcotraficantes y la creciente ola de asaltos, amenazas, extorsiones y secuestros aterrorizan a la sociedad juarense y durante 2008 ya desplomaron la actividad turística, hicieron cerrar unos cinco mil negocios y se desplazaron alrededor de tres mil familias.
De 2003 a 2007, Ciudad Juárez tuvo mil 181 homicidios; pero sólo en este año ya van mil 350, aparte de los 45 ultimados que aparecieron en dos narcofosas. También hubo al menos 30 secuestros de empresarios, 82 asaltos bancarios, 15 mil vehículos robados y 30 negocios quemados por no pagar “cuotas” de protección. En el estado la cifra de muertos es de casi dos mil, entre ellos 80 policías de diversas corporaciones, 61 en esta parte de la frontera.
El primero de abril pasado –cuando ya se computaban 210 homicidios tan sólo en Ciudad Juárez– los gobiernos federal, estatal y municipales pusieron en marcha el Operativo Conjunto Chihuahua, presuntamente con más de dos mil militares y policías.
La delincuencia creció en más de 500 por ciento, y todos los días cobra víctimas, que son en gran parte vendedores de drogas, policías, abogados, periodistas y otros civiles.