Por Rodrigo Sotelo / Twitter: @SoteloRodrigo
Hagamos un ejercicio de proyección, con información reunida y disponible, sobre los personajes que se perfilan como candidatos y candidatas para el espacio de representación electoral más importante: el Senado de la República.
Hay que considerar que en esta ocasión la particularidad indica que, dadas las condiciones oficiales y de la oposición, el próximo senador y senadora no tiene garantizada la gubernatura como se ha venido normalizando.
Es decir, si al Senado llegará quien elija López Obrador (y no precisamente quien convenga al Gobernador), el Presidente ya no existirá en 2027; lo que meterá en la competencia a quien se haga de la alcaldía de la capital.
Aunque, bueno, la relevancia semejante que me parece tendrá quien encabece el ayuntamiento de Hermosillo merece un análisis aparte.
Parto de la premisa indudable de que el próximo año repetirá Morena y que la primera minoría la disputarán casi en igualdad el Frente Amplio y Movimiento Ciudadano.
Pero, ¿quién será el candidato o la candidata que encabece la fórmula del poderoso partido en el gobierno?
Tengo información suficiente para adelantar que la candidata será Ana Gabriela Guevara, inquebrantable directora de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte, quien con esa condición llegó y se mantuvo al frente de la Conade.
Y como no es un asunto de popularidad o capacidades, sino de lealtades al Presidente que controlará todo lo federal, el compañero de fórmula de Guevara será… Jorge Taddei, delegado estatal de la Secretaría de Bienestar.
Incluso, hace unos días Taddei admitió por primera vez en entrevista que contemplaba esta posibilidad, pero que primero tenía que hablarlo con el gobernador Alfonso Durazo.
Antes, ya se había reunido con su ejército de promotores electorales, o servidores de la nación, para despedirse y comunicar esta decisión.
Pero lo entretenido estará en la lucha por el segundo lugar, que igual llega al Senado y con la ilusión de consolidarse como uno de los escasos liderazgos antagonistas que sobrevivan al 2024.
Por el Frente Amplio, aunque suene inconcebible, alguien le está sobando el ego al ex gobernador Manlio Fabio Beltrones con la ocurrencia de que puede ser él el candidato y no su hija Sylvana Beltrones.
Se sabe que Manlio sí está considerando auto nombrarse candidato, en el entendido de que no goza de la cercanía necesaria con la dirigencia nacional del PRI para que lo incluyan en una de las 5 ó 6 posiciones plurinominales a las que tendrán acceso.
La panista que acompañe al apellido Beltrones, es perfectamente obviable por intrascendente y por sus nulas probabilidades (pero ponga el nombre de Alejandra López Noriega).
Ahora, quien sea candidato o candidata del Frente tiene claro que se topará con Ernesto De Lucas, de Movimiento Ciudadano.
El Pato que la tendrá cuesta arriba, aunque con una motivación emblemática en frente para traducir el presumido menosprecio que le dedican, en la imperiosa necesidad de despertar la imaginación y revivir su esencial irreverencia.
En resumen, será una contienda de mucho contraste y donde no habrá sorpresas:
Para Morena solo es un trámite al que contribuye una alianza de intereses familiares que acapara sin recato al saberse en decadencia y de antemano detestada.
Nepotismo y uso de programas sociales
¿Recuerdan cuando Marcelo Ebrard acusó que la estructura de la Secretaría del Bienestar era utilizada para promover la candidatura de Claudia Sheinbaum?
Ocurrió a mediados de agosto, previo a la definición de la “Coordinadora Nacional de los Comités de Defensa de la Cuarta Transformación”.
Pues como no se caracterizan por cuidar las formas, en X aventuré que el delegado Jorge Taddei, a través de su hija la diputada Celeste Taddei, legitimaba la denuncia que a nivel nacional hacía el ex secretario de Relaciones Exteriores.
En aquel momento argumenté el desmesurado proselitismo a favor de Sheinbaum que mantenía el orgullo de su nepotismo en el Congreso del Estado.
Pero me quedé corto.
Jorge Taddei también emplea la delegación de Bienestar Sonora para promocionar su candidatura el Senado de la República.
Y no puede haber nada más inmoral y ventajoso en el servicio público, que lucrar con la ignorancia y la pobreza de la gente.
En sus propias palabras que ellos vomitan a diario: utilizar como trampolín el reparto de dinero y los programas sociales del gobierno, es miserable, oportunista, ruin, carroñero.
¡Wendy hasta supervisa obras!
No es distinto el repugnante caso de la secretaria Wendy Briceño Zuloaga.
A esta funcionaria le dio por “estirar” las atribuciones de la Secretaría de Desarrollo Social para recorrer el estado y promover su imagen con recursos de la dependencia.
Ayer, incluso, en cómoda entrevista anunció que se registrará como aspirante al Senado en el proceso de Morena y que estaría en condiciones de renunciar a su cargo “si así se requiere”.
Lo dijo en su faceta de Secretaria y en el marco de la promoción de los programas sociales que opera.
¿No que muy distintos y muy ofendidos? ¿Por qué no lo hace al revés? Es decir, primero renuncia y con propios recursos difunde su aspiración.
Ayer mismo, subió un video a sus redes presumiendo la “supervisión de obra que consiste en la construcción de una pila de almacenamiento de agua potable en Granados”.
Quizá Omar del Valle Colosio ahora reparte despensas y no nos hemos enterado…
A Wendy Briceño se le olvida que el “bateo libre” obliga al juego limpio y al respeto de las reglas.
Gracias y hasta la próxima con el favor de Dios.
Rodrigo Sotelo Mendívil
Director General Masmedio
Twitter: @SoteloRodrigo
Correo: rodrigosotelo@masmedio.com / rodrigosotelo69@hotmail.com
