Por
Rodrigo Sotelo / Twitter: @masmedio
Vamos a intentar entender los excesos deliberados y los errores
no forzados que está cometiendo
desde el ayuntamiento la alcaldesa Célida
Teresa López Cárdenas.
Nadie duda que a la Presidenta Municipal le corresponde
la carga de culpa, pero hay que anotar que sus cuestionables decisiones se
alimentan de la complacencia –en ocasiones
aliento- de una oposición que ha pactado
complicidad como única alternativa de subsistencia.
Pero Célida López lee mal esta perversa disposición priista, que se suma a las simpatías naturales
de sus similares panistas.
Célida podría estar cayendo
en la trampa, aunque de momento
aprovecha la circunstancial colaboración que queremos demostrar.
Hace unos días, el ex alcalde Ernesto Gándara Camou opinó ante periodistas que no es correcto se
golpee a Célida López “en las discusiones
que se dan en la opinión pública” y que más bien tendríamos que darle la oportunidad de resolver el
problema.
Al también ex Senador se le preguntaba sobre la polémica
que genera la sospechosa licitación para el arrendamiento de camiones recolectores de basura.
Al margen de la usual
ambigüedad, Ernesto Gándara va más allá del tácito respaldo: ¡pide obviar
elementos fundamentales como la obligación gubernamental de buscar economía y ofrecer transparencia!
El Borrego Gándara
se adentra más y es más severo solo para temas electorales, particularmente cuando
ve afectado su bienestar personal al
impedírsele alguna candidatura…
No menos simplón y
conformista, el panista Luis Ernesto
Nieves Robinson Bours publicó en tuiter que “si hubo una licitación, conforme a derecho, con precios de mercado y la
ciudad se va a quedar con los camiones, yo la apoyo @CelidaLopezc, siempre
habrá quien no esté de acuerdo, el resultado es lo que importa” (sic)
El propio diputado Eduardo
Urbina Lucero, del mismo PAN, no resistió la tentación de responderle que,
además de resultados, importaba la transparencia y la máxima publicidad.
Este Güero que
aprobó el COMUN y que suele reconocerlo como un desacierto, al parecer olvida
que lo legal o “conforme a derecho” no
necesariamente es justo o conveniente para los ciudadanos.
Aunque estas voces espontáneas
y convencidas resultan secundarias ante las ausencias y disimulos en Cabildo
y el Congreso del Estado.
¿Dónde están los regidores priistas? ¿La dirigencia del PRI Hermosillo? ¿Por qué el PAN permite
que su única regidora se haya convertido en la operadora y ejecutora de estos abusos? ¿Y los diputados locales de Hermosillo, del PRI o del PAN?
¿Qué pensará Jesús
Ramón Díaz Beltrán, ex candidato a dirigente estatal y ex líder municipal
del PAN, de la participación activa del PRIAN
–como solía repudiar- en el actual ayuntamiento de Morena?
Como periodistas y observadores de esta degeneración política, reconforta
escuchar posturas reflexivas y sensibles
como la de Carlos León García.
Charly es
regidor de Movimiento Ciudadano, y
tal vez el único con el valor de declarar que la licitación y el esquema para
renta de los camiones carece de lógica y huele
mal “como la basura”.
¿A poco a los demás regidores no les parece extraño que
de las tres empresas que acudieron a las reuniones o sesiones informativas solo
una haya presentado propuesta económica? ¿Es el único al que le queda la sensación
de que todo esto “ya estaba apalabrado”?
Y nos quedamos con esta frase frontal y contundente de Charly León:
“(Al) Licitar con
tanta rapidez y sin máxima publicidad en la convocatoria, pareciera que la
Presidenta Municipal quiere hacer negocio con un proveedor y no buscar lo mejor
para los hermosillenses”.
En otras palabras, que la solución a una crisis generada no
se asuma como la oportunidad para lucrar y simular.
Gracias y hasta la próxima con el favor de Dios.
Rodrigo
Sotelo Mendívil
Director
General Masmedio
Correo: rodrigosotelo@masmedio.com
Twitter:
@masmedio