Por
Rodrigo Sotelo / Twitter: @masmedio
A casi tres semanas de iniciado el proceso electoral, se
consolida la percepción de que la campaña del aliancista Ernesto Gándara es,
además de insulsa y timorata, una imitación que carece de creatividad.
En redes, ya no nomás en espacios periodísticos independientes,
sus inviables promesas empiezan a despertar sospecha y escepticismo.
Vía Twitter,
una usuaria le preguntó al candidato de la Alianza si conocía las finanzas del
Estado y cómo haría para arreglarlas sin dejar de cumplir lo que anda ofreciendo.
“Y sin aumentar los
impuestos. No quiero que salgan sorprendidos después con que encontraron un
cochinero y ya no van a poder cumplir” (sic).
No ha habido respuesta, y no la habrá porque el sentido
común de esta dama formula interrogantes esenciales y pide explicaciones
básicas, que el priista sistemáticamente omite.
Y es que, la campaña de Ernesto Gándara nos sorprendió
por su derroche y tendencia a reproducir estrategias ajenas.
Al estilo López Obrador, el Borrego Gándara busca simpatías prometiendo dinero y apoyos: despensa
familiar, pañales, una Beca Cosecha,
pagar seguro a trabajadores, un segundo aguinaldo, pago de aplicaciones y
plataformas para vendedores, renovar licencias gratis.
Y ahora va en la creación de una agencia de innovación y
emprendimiento y en el pago del IMSS a jóvenes recién egresados que sean
contratados en alguna empresa.
“Es común que
muchachos y muchachas recién egresados no sean considerados por empresas por
falta de experiencia, sin embargo no pueden acumular experiencia por falta de
oportunidades laborales”.
El Jóvenes
Construyendo el Futuro del gobierno federal, pero más chafita y sin sustento presupuestal.
La campaña de Gándara no parece la de un priista sensato,
honesto y realista, es más bien de imitación al asistencialismo de la Cuarta Transformación.
De imitación, pero sin imaginación para advertir que al
prometer lo que promete, admite que sus similares no han alcanzado el nivel de
desarrollo y bienestar que él plantea en sus propuestas.
Sin imaginación porque no comprende que hay otras
prioridades como la inseguridad pública y la violencia contra las mujeres. ¿Si
habrá Ernesto Gándara que a diario están desapareciendo mujeres? ¿Qué trae al
respecto?
Sobre la pandemia, ¿qué propone en salud pública y qué
dice del absurdo irrealizable de pedir pruebas Covid a vacacionistas en Semana
Santa, con la frontera siempre abierta y las campañas políticas como foco de
contagio?
La del Borrego
es una campaña sin imaginación porque no se entera lo que pasa en las escuelas
y evade plantear una ruta eficiente y práctica para recuperar el tiempo perdido
con los docentes y alumnos.
No se puede gobernar con imaginación y ofrecer
resultados, cuando en lugar de voltear a ver estas apremiantes necesidades, el
candidato habla de paquetes de internet de alta velocidad a niños estudiantes
que no cuentan con este acceso.
Si Gándara sabe que en Sonora la mitad de los niños no
tienen acceso a internet, ¿para qué quiere dotarlos de herramientas
tecnológicas cuando regresarán a las aulas sin saber leer?
Se necesita imaginación, no tanto dinero y ocurrencias
electoreras. Imaginación para detectar el descontento social que provocan los
Yaquis en la carretera. ¿O no viaja por tierra el candidato?
Le falta empatía, sensibilidad y carácter de gobernante.
No siempre es cosa de pesos y centavos o de repartir lo que no se tiene.
Al candidato de la Alianza Va Por Sonora le podría ir mejor, cuando entienda que ahora el voto
es más emocional, menos mecánico como a él le enseñaron en el PRI de los ochentas.
Y finalmente es fantasioso, porque no hay método
gubernamental responsable que permita todos esos recursos extraordinarios (que
no detalla) requeridos para una sola de sus propuestas.
¿Qué los genios
que acompañan al candidato no se dan cuenta? ¿Quiénes son sus estrategas? ¿Javier
Gándara? ¿Luis Iribe? ¿Su sobrino Minimí? ¿Leo Apodaca?
A Ernesto Gándara le hace falta más que imaginación, requiere
talento y una visión más razonable e integral.
Toño no transita en el PRI… ¡y se pelea con
los Munro!
Alguien está mal asesorando al candidato del PAN a la
alcaldía de Hermosillo, Antonio Astiazarán, que lejos de intentar sanar viejas
heridas está empeñado en sumarse más antipatías.
A través de redes sociales, identificables panistas que
promueven la Alianza y promocionan al guaymense como la mejor carta para la capital, empiezan a lanzarse contra ¡su
propio dirigente estatal!
No es una imprudencia improvisada, el Toño mantiene un serio enfrentamiento
con el alcalde Kiko Munro, de Puerto
Peñasco.
Su problema es que deja huellas, enseñó mucho las ganas
de cobrarle a los Munro la exhibida que le dieron por las presuntas
irregularidades de Energía Sonora.
Los panistas, además, se dan un balazo en las patas… ¿qué es eso de que la Comisión Permanente
apruebe la candidatura del cuñado en Puerto Peñasco y ahora quieran reclamarle
el número de familiares que van en la planilla? ¿Esos son los criterios con los
que asignan candidaturas?
Pero esas son minucias, al candidato Ernesto Gándara
tendría que inquietarle la desunión interna con la que los panistas intentarán
aportar a su causa estatal.
Lo del Toño Astiazarán
sinceramente nos extraña, todavía no llega a ser candidato y ya actúa como si
la dispuesta fuera por el Senado de la República.
Es la tónica individualista de la Alianza: grupos
divididos, buscando jalar agua solo a sus molinos y haciendo todo lo posible porque pierdan los
otros integrantes de la misma Alianza.
El Borrego Gándara
va bien acompañado, camina a paso muy, muy firme…
Ah, por cierto, la alcaldesa Celida López les agrade
estos detalles.
Gracias y hasta la próxima con el favor de Dios.
Rodrigo
Sotelo Mendívil
Director
General Masmedio
Twitter:
@masmedio
Correo: rodrigosotelo@masmedio.com / rodrigosotelo69@hotmail.com
