Por
Rodrigo Sotelo / Twitter: @masmedio
La dirigente panista Alejandra
López Noriega, presume una confianza
electoral en Hermosillo que, más bien, debe encender focos rojos y preocupar a los militantes y simpatizantes de este
partido.
En encuentro con periodistas, a la estrenada presidenta
del Comité Directivo Estatal del PAN se
le ocurrió decir que casi firmaba
la victoria de Acción Nacional en la capital por el voto duro que mantienen y porque “el PRI ha caído en las preferencias electorales”.
Es decir, Alejandra
sostiene que son capaces de recuperar el Gobierno de Hermosillo sin necesidad de tener claro quién sería el
candidato o candidata que impulsarían para alcanzar este complejo objetivo, casi hazaña.
Entendido de otra forma, el PAN asegura que gana Hermosillo
a pesar o independiente mente del candidato propio y del que postule el PRI Gobierno.
Difícil creer que en tiempos donde se vuelve determinante
la anticipación y la disciplina, se puede tener esperanza de triunfo cuando no
hay candidato definido, y por causa de la tibieza
y escasa competitividad de los que aspiran.
Porque esa es la realidad de la indecisión panista: los perfiles que se interesan en la oposición no
logran superar o empatar la determinación de, cuando menos, tres priistas bien posicionados.
Quienes toman decisiones en el PAN están convencidos que Javier Neblina Vega no les conviene,
que Edmundo García Pavlovich
garantiza la regiduría, que Mirna Rea de
López llega tarde y con mucho en contra y que Héctor Larios Córdova sigue pensativo.
Y no es que esta valoración del panismo hermosillense que
aquí se hace desconozca atributos, aptitudes o experiencia.
Solo es cosa de rentabilidad
electoral en base a estructura real, recursos, exposición en medios,
contacto con la gente y proyección política.
Pero veamos caso por caso:
El diputado Javier
Neblina podría ser el más conocido de los mencionados, incluso con etiqueta
de ganador, aunque no gusta el
reciente pasado que representa, su prolongada inactividad política y el desaseo en su imagen pública.
Lo
de las alarmas ya no sonó y su oficina de enlace pareciera predio
en abandono.
Mundo García Pavlovich
irrumpió con cierta idea, pero nunca pudo organizarlas ni conformar un equipo
sólido que lo legitimara y le permitiera generar certeza para acercar respaldos
y recursos.
Digamos que siempre se supo que su verdadera intención es
ser diputado.
En cuanto a Mirna
Rea, es justo decir que esta señora solo es conocida en el ámbito
empresarial. Y empezar de cero y prácticamente sola, insistimos, es una sentencia de derrota.
Mientras que el caso de Héctor Larios pasa más por la no
disposición que por la idoneidad del producto.
Larios no parece estar interesado a sufrir el desgaste de
una campaña cuesta arriba, con equipo calificado y razonables expectativas,
pero en un contexto atípico donde
hasta el enojo social que suponen pueda
moldearse y afectarle.
Entonces, ¿Alejandra
López Noriega respondió lo que al entusiasmo interno conviene o realmente piensa
que pueden regresar al Ayuntamiento sin
candidato?
Luis
Serrato sería buen perfil, pero…
En medio de esta incertidumbre, no es un secreto que hasta
se ha llegado a socializar la idea de
que se considere a Luis Serrato Castell como una alternativa decorosa.
Aquí vamos a insistir en las adecuadas características y
méritos legislativos de este astuto panista, aunque evidentemente no se
encuentra en su mejor momento.
Serrato es sin duda un perfil indispensable para el PAN
en los próximos comicios electorales, pero pesan sobre sus aspiraciones
personales propósitos y acuerdos más
grandes para su partido y la cúpula que lo dirige.
El de Luis Serrato es un caso que podría tener un final
desafortunado que se presentará en varios con similares condiciones y que ya
negociaban apoyos y patrocinios en función de la “segura candidatura” que tenían en su futuro inmediato.
A Serrato debe abrumarlo la pena de estar siendo
desplazado a grado tal que desde hace semanas suspendió giras por el estado y
olvidó compromisos, con lo que pone peligrosamente en riesgo el prestigio
ganado.
Se puede representar un proyecto viable, pero si el
político se ubica en una circunstancia adversa y no la enfrenta con la seriedad
y dignidad requerida, el resultado -y
las secuelas- puede ser aún más catastrófico.
Gracias y hasta la próxima con el favor de Dios.
Rodrigo
Sotelo Mendívil
Director
General Masmedio
Correo: rodrigosotelo@masmedio.com
Twitter: @masmedio
